UNA MEZCLA MÁGICA
(Escrita por mí para la editorial de la revista
"artesana" del club de arte "Catalina de Erauso" )
Adentrarte en su mundo es el blanco y el negro, el lleno y el vacío, la inspiración y la expiración. Es a veces hasta perder la consciencia.
Pintar acuarela es ese papel en blanco, el pincel en la mano y la paleta de color, mirándote, esperándote, y sentir ese cosquilleo en el estómago como cuando tienes tu primera cita. Comenzar a pintar una acuarela es como entrar en un parque de atracciones, primero con la ilusión de creer que sabes lo que quieres plasmar....pero de pronto la duda....algo dentro de tí quiere aflorar y en ese caso, lo mejor es coger el pincel, cerrar los ojos y como en una buena melodía dejarte llevar....sentir el tacto, la humedad....soltar la mano y olvidar lo que te rodea...y mucha agua chorreando a su antojo, que no puedes controlar, pero que en el fondo ni quieres.¡Qué gustazo!...la incertidumbre y hasta el puntito de locura, de descaro y allí sobre el papel empiezan a adivinarse cosas...¿sigo?¿le doy más color?¿y si la estropeo?
Es como una alegoría de la vida...aparece el miedo, pero la acuarela no es control, es libertad, pasión, atrevimiento, dejar que brote lo más íntimo de nuestro ser, es dejarte llevar, fluir y disfrutar.
Quizás aquí radica su mayor belleza, que no solo satisface la vista del que la mira, sino que nutre el alma de quien la pinta.
Eduardo Saldaña.
Adentrarte en su mundo es el blanco y el negro, el lleno y el vacío, la inspiración y la expiración. Es a veces hasta perder la consciencia.
Pintar acuarela es ese papel en blanco, el pincel en la mano y la paleta de color, mirándote, esperándote, y sentir ese cosquilleo en el estómago como cuando tienes tu primera cita. Comenzar a pintar una acuarela es como entrar en un parque de atracciones, primero con la ilusión de creer que sabes lo que quieres plasmar....pero de pronto la duda....algo dentro de tí quiere aflorar y en ese caso, lo mejor es coger el pincel, cerrar los ojos y como en una buena melodía dejarte llevar....sentir el tacto, la humedad....soltar la mano y olvidar lo que te rodea...y mucha agua chorreando a su antojo, que no puedes controlar, pero que en el fondo ni quieres.¡Qué gustazo!...la incertidumbre y hasta el puntito de locura, de descaro y allí sobre el papel empiezan a adivinarse cosas...¿sigo?¿le doy más color?¿y si la estropeo?
Es como una alegoría de la vida...aparece el miedo, pero la acuarela no es control, es libertad, pasión, atrevimiento, dejar que brote lo más íntimo de nuestro ser, es dejarte llevar, fluir y disfrutar.
Quizás aquí radica su mayor belleza, que no solo satisface la vista del que la mira, sino que nutre el alma de quien la pinta.
Eduardo Saldaña.
Ver su blog http://acuarelasaldaa.blogspot.com.es/
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